Los diputados de Vox se marchan del Congreso dejando los pinganillos en el escaño de Sánchez
PP y Vox protestan ante Armengol pero la socialista responde que ella "ordena los debates"
Babel en el Congreso: podrá hablarse en catalán, euskera, gallego, valenciano y aranés
Armengol destina 280.000 € a convertir el Congreso en la Babel de Sánchez hasta fin de año
Los diputados de Vox con su presidente al frente, Santiago Abascal, han plantado a la presidenta del Congreso, la socialista Francina Armengol, ante su cacicada de imposición del uso exclusivo del catalán, euskera, gallego, valenciano y aranés.
En cuanto ha subido a la tribuna José Ramón Gómez Besteiro, diputado del PSOE y ha empezado a usar el gallego con la traducción simultánea para defender la reforma del reglamento que permita dicho uso exclusivo de lenguas cooficiales, la portavoz de Vox en el Congreso, Pepa Millán, ha pedido la palabra. Tras negársela Armengol, ella y todo su grupo han abandonado el hemiciclo, dejando los pinganillos en el escaño del jefe del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, de viaje en la cumbre de la ONU en Nueva York.
«Le ruego que se siente y que dejemos hablar al señor Besteiro. Este es el templo de la palabra y el uso de palabra lo tiene el señor Besteiro», ha dicho Armengol, lo que ha llevado a los diputados de Vox a abandonar sus escaños y salir del hemiciclo, depositando los auriculares en la bancada del Gobierno, junto al escaño de la vicepresidenta Yolanda Díaz, mientras la izquierda aplaudía.
Nos han elegido para representar a los españoles. Creo que millones de ellos querían que hoy le arrojáramos a Sánchez su artefacto de odio y de división. Pervierten nuestras lenguas utilizándolas contra el entendimiento, contra la convivencia, contra la ley.
Tomemos nota de… pic.twitter.com/euoopREkNP
— Santiago Abascal 🇪🇸 (@Santi_ABASCAL) September 19, 2023
«Se está vulnerando la legalidad vigente, se está tramitando con una iniciativa que aún no está aprobada la introducción de lenguas, que son cooficiales en sus respectivas regiones. Estamos asistiendo a la exaltación de la división, del enfrentamiento con el dinero de todos los españoles, y nosotros no vamos a ser cómplices de esta ruptura de la convivencia, que al final es lo que pretenden escenificar, pasándose el reglamento por el forro de la chaqueta», ha declarado Millán, portavoz y diputada de Vox, en el pasillo del Congreso tras dejar el hemiciclo.
Por su parte, el presidente de Vox, Santiago Abascal, se ha referido al incidente a través de las redes sociales. «Nos han elegido para representar a los españoles. Creo que millones de ellos querían que hoy le arrojáramos a Sánchez su artefacto de odio y de división. Pervierten nuestras lenguas utilizándolas contra el entendimiento, contra la convivencia, contra la ley. Tomemos nota de estos pasos preparatorios para el nuevo golpe, que tratarán de dar desde la Moncloa», ha señalado después de que los diputados de Vox abandonasen el Congreso.
Antes de la reforma
Previamente a la protesta de Vox, también ha tomado la palabra desde el escaño la portavoz del PP en la Cámara baja, Cuca Gamarra, quien ha denunciado que la proposición de reforma del reglamento «no puede aplicarse» desde hoy si todavía «no se ha debatido». De hecho, dicha reforma impulsada por Pedro Sánchez y sus socios no será aprobada por el Pleno hasta el próximo jueves. «Los poderes públicos estamos sometidos a la legislación vigente y el acuerdo de la Mesa se aparta de ella porque si no, no estaríamos aquí para reformar el reglamento», ha manifestado Gamarra, instando a Armengol a que sea ella «la primera que cumpla» con la ley.
Ante ello, la tercera autoridad del Estado ha respondido: «Esta presidencia está para hacer cumplir el reglamento y ordenar los debates. La propuesta de reconsideración (del PP ) ha sido vista hoy y la próxima Mesa decidirá sobre la misma. No hay ninguna reconsideración que pueda parar el trámite de toma en consideración de esta proposición de ley», ha esgrimido Armengol, afirmando que el orden del día seguiría conforme se había fijado en la Mesa y en la Junta de Portavoces, ambos órganos controlados por el PSOE de Sánchez, Sumar y sus socios separatistas, nacionalistas y proetarras.
En concreto, la Presidencia del Congreso ha provisionado un gasto de 280.000 euros para la imposición del uso exclusivo de las lenguas cooficiales hasta el próximo 31 de diciembre. En este importe se incluye aquí tanto el dinero gastado ya en material, esto es, 53.500 euros, como el reservado para la contratación de traductores autónomos mediante contratos menores. En total, 279.849 euros para lo que resta de 2023.
Después de Besteiro (PSOE), que ha intercalado el castellano y el gallego en su discurso, ha intervenido la portavoz de Sumar, Marta Lois, que ha hecho lo propio. Por su parte, su homólogo de ERC, Gabriel Rufián, ha hablado la mayor parte de su turno en catalán, al igual que el representante del PNV, Joseba Andoni Agirretxea, con el euskera. La portavoz de Bildu, Mertxe Aizpurua, ha usado el euskera y el castellano. Y el último proponente de la reforma, el diputado del BNG, Néstor Rego, ha empleado el gallego en todo momento.